El mundo es una mierda. Allá donde mires estamos criando injusticia y mentira. Nos engañan desde arriba. Nos engañamos nosotros. Ellos quieren crear una realidad a su gusto. Mientras tanto, nosotros, los de abajo, nos sentimos cómodos porque, entre el fango, encontramos una satisfacción pueril en la que queremos removernos. Nos da igual que todo apeste, porque nos han hecho creer que debajo de ese olor nauseabundo hay algo todavía peor. Me temo que estamos en las últimas fases de nuestra aceptación como siervos.
de Un mundo (in)feliz de Bruno Cerdeñosa.