Primero que nada tengo que reconocer que estoy enganchada al Twitter, no soy de las que tuitea mucho, ni soy de las que tiene decenas de miles de seguidores y seguidos, pero confieso que me gusta más hacer de voyeour 2.0 y revisar timelines, enterándome así de los puntos de vista de la gente que son tan diversos y numerosos como la gente misma.
En Twitter sigo tres tipos de personas, las primeras son las personas que conozco y con las que comparto en el mundo 1.0, estas son generalmente las que sigues en un inicio e incluso son las que te enseñan como funciona el asunto. Las segundas son las personas que no conoces en el mundo 1.0 pero que sigo porque leí su timeline o blog y me gustó lo que vi, en mi caso estas son más numerosas que las primeras. Las terceras no son personas como tal, puede ser una revista, un periódico o una empresa, estos últimos son los más escasos pero los me mantienen informada ya que me niego a tener un televisor.
Sigo una rutina a la hora de seguir a alguien cuando recibo un follow, generalmente voy a su perfil, leo su bio y husmeo en su timeline, si lo que leo es de mi agrado simplemente lo sigo de vuelta, de lo contrario no lo haré y es que el timeline dice tanto de nosotros, mucho más que nuestra bio y definitivamente miles de veces más que nuestra foto, dice tanto que podríamos decir que actúa como un lente amplificador magnificando nuestros defectos y virtudes. Si, si una persona es intolerante con toda seguridad lo será mucho más en Twitter, atacando con saña a las personas que sigue y expresan opiniones contrarias a la suya, si una persona es mal educada, con seguridad no contestará o agradecerá si respondiste alguna de sus preguntas, si tiene baja autoestima con seguridad lo expresará con un unfollow a aquellos quienes no le siguen, pero no sólo lo negativo se magnifica, también si eres atento y cordial con seguridad lo serás mucho más en el 2.0, es que estar allí comentando cada cosa que nos pasa por la mente o expresando nuestras opiniones acerca de tal o cual asunto, es análogo a poner nuestra personalidad bajo el lente de una lupa.
Bajo el lente de esa lupa he encontrado personas maravillosas con los que hoy comparto día a día y que quizás no habría conocido de no ser por este medio, he conocido gente interesante que me enseña cosas que no sabía, gente graciosa que me hace reír y hasta me cambia el humor, gente amiga que te levanta el ánimo y siempre te ofrece una sonrisa, he descubierto el lado humano de algunas celebridades que pensé que no lo tenían y también he descubierto que algunas que creía que lo tenían carecen de el, y aunque parezca increíble he descubierto que hasta ciertas corporaciones se interesan más por ti que tus “amigos” 1.0.
